Una vez más, camino por las calles de Córdoba y me encuentro con esta atrocidad. Podría colocar muchos adjetivos a esta locura que se está plasmando en la ciudad, pero creo que el mejor es “desprecio”.Las grandes empresas contructoras están demoliendo parte de la historia de nuestra cultura. Derriban ladrillos como si soplaran una torre de naipes y no les importa nada.
Por supuesto que los responsables de nuestro gobierno se mantienen al margen. Seguramente porque no les parece importante o porque los acuerdos con dichas empresas engrosa las arcas de su patrimonio.
La imagen de la fotografía es una casona antigua de una de las calles más importantes de “la docta”: Belgrano y Montevideo, las famosas cinco esquinas. Antes funcionaba una casa de comidas. Actualmente se ven las publicidades rodeando sus paredes, lo cual indica que será derribada para construir una mole de cemento moderna.
No se trata de estar en contra de este último concepto, se trata de respetar la historia y resguardar parte de nuestra cultura que, a travez de estos actos, va acumulando escombros, tantos como los de estas edificaciones.
Perro que ladra y muerde.
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